miércoles, 12 de noviembre de 2008

La niebla y la doncella (Lorenzo Silva)

Nadie conoce a nadie. Ni mucho menos puede resolverle la papeleta cuando la vida se tuerce. Nadie va a darte la poción mágica que acabe con tus problemas. O te salvas solo, o te hundes. Porque nadie, por mucho que te sermonee, está nunca a tu lado para mirarla la cara al dragón.